martes, 12 de agosto de 2008

Le suena Aksum?

Su historia es una advertencia a los pueblos contra la ambición ciega. Fue el primer reino que tuvo a la cruz de Cristo en sus monedas de oro y dicen que durante el siglo III figuró entre los cuatro reinos más influyentes del mundo al lado de Roma, China, Persia. Hoy casi nadie conoce su nombre...Le suena Aksum o Axum? Su antigua capital aparece como una ciudad ignorada de Etiopía, uno de los países más pobres de Africa. Pronto sin embargo, se empezará a hablar de él gracias a ese pasado. Se iniciaron ya los trabajos para poner en pie nuevamente un obelisco de Aksum que el diario londinense The Daily Telegraph ubicó hace pocas semanas entre las obras de arte más importantes de la historia humana. Fue arrebatado por Mussolini a los etíopes para ponerlo en la plaza Porta Capena de Roma y ha sido devuelto en el siglo 21 por Italia, después de varias décadas de protestas y pretextos.
Los principales obeliscos de Aksum llaman la atención por su porte y su decorado que simula cámaras en su interior, con falsas ventanas y puertas. Fueron levantados en los siglos iniciales del cristianismo. El obelisco que estuvo en Roma nos recuerda un modelo art.-decó. Todos forman parte de de la lista del Patrimonio Universal de Unesco. Ya en los tiempos de Jesus, Aksum era notorio por sus telas, animales,, piedras preciosas, especias, marfil y oro que eran vendidos a lo largo del Imperio Romano, de Arabia y de la India. En Jedda , puerto saudita donde cada año desembarcan millones de peregrinos rumbo a la Meca, uno de sus hombres sabios me dijo que aún ellos recuerdan a un decadente reino de Aksum que se apoderó de la ciudad en el siglo VIII...¡Larga memoria!
El reino de Aksum adoptó el cristianismo sin dejar de ser un lugar de encuentro. En el siglo IV tenía súbditos, judíos, nubios, sabeos, cristianos y budistas: La milenaria Iglesia Ortodoxa Etíope, la confesión cristiana más cercana a la tradición judía, viva hasta hoy, será testigo el próximo año de una emoción colectiva: el instante en que el gran obelisco sea empinado otra vez y vuelva a mirar el cielo bajo el cual nació. UN MOMENTO MAGICO PARA CONOCER LA BELLA ETIOPIA...
Articulo de Luis Alberto Ganderats. obtenido de Viajes Nº 157 (6-4-08) resumido.

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